He leído tantas veces el mismo párrafo, que creo ya me lo aprenderé de memoria.

Tengo la pena guardada en lo mas profundo del corazón, dentro de un baúl de cartón.

Tengo una pena gatuna, que rasguña, una pena de gato gigante, tengo una pena de gato-leon.

Quién me seguirá las historias?

Dolor

Duele en todas las maneras posibles e imaginables, incluso en aquellas que nadie puede creer, pensar o imaginar...

duele también de formas metafísicas y parapsicologícas.

No me quedare a ver como transformas el amor en odio...

Quisiera que regresara.

Es imposible olvidar algo sin las ganas de hacerlo, dejarlo pasar en el tiempo es la peor cosa, porque jamás pasa, primero se debe querer que pase; yo no puedo soltarlo, lo sigo reteniendo... de alguna forma se que jamás volveré a recuperar eso que perdí en él alguna vez, porque es el único que puede darlo, porque de su ser nació en un principio, pero no se que paso, no se a donde se fue y jamás volvió, pero jamás perdí la esperanza de que regresará, ni aún hoy la he perdido, por eso no puedo soltarlo y dar las ganas que generan el  olvido, porque como todo ser humano, me aferro con garras a la esperanza.

Pena.

Tengo una pena de amor, que no fue amor, que hacia daño... pero es dolor de daño de pasión, de una de fuego y colores, de una que no se puede olvidar, porque es como de película, a veces, casi siempre... tengo de esas penas que no sanan, que están como pegadas en algún lugar de mi apretado corazón, que no importa cuanto llore, no sirve, porque necesita de todo un salado y enorme mar para limpiarse...

Tristeza.

Tengo una tristeza pintada en el interior con temperas (de colores) de frascos que quedaron abiertos al tiempo y el viento, que ya se secaron;

si te hubieras ido totalmente, las cosas serían aún más deprimentes...